Los trabajadores autónomos necesitan una protección extra, ya que en caso de accidente o enfermedad que generen una reducción o parada en su actividad y en sus ingresos, lo que dificulta el pago de los gastos fijos e incluso pone el negocio en peligro. Para evitar estas situaciones, en la Correduría de Seguros Rafael Almeda, ponemos a disposición de los trabajadores autónomos seguros de protección personal específicos para este sector, con los que le ayudamos a proteger sus ingresos en caso de accidente o baja laboral.
1. SEGURO DE BAJA POR ENFERMEDAD
Con esta modalidad de seguro también conocida como Incapacidad Laboral Temporal (ILT), la compañía aseguradora garantiza una indemnización diaria para mantener la cobertura económica justo cuando más lo necesitas y que te permite cubrir los gastos fijos de tu actividad a pesar de estar de baja médica.
Puedes seleccionar entre las siguientes garantías:
- Libre elección del capital a percibir por parte del cliente, según sus necesidades y entre ciertos límites.
- Reembolso de la prima mensual del seguro en cado de incapacidad temporal, con un máximo de 6 meses.
- Máxima agilidad en los trámites.
- Rapidez en el pago: plazo máximo de 48h desde la recepción de toda la documentación necesaria.
- Al contratar este seguro te puedes beneficiar de deducciones fiscales, que pueden llegar hasta los 500 para aquellos que tributen por actividades económicas en el IRPF por estimación directa.
- Segunda opinión médica gratuita
2. SEGURO DE ACCIDENTES
Cualquier accidente puede ocasionarle una pérdida de ingresos que incluso puede poner en problemas su negocio o su propio patrimonio. Con este seguro se cubre el pago de una cantidad diaria mientras el autónomo esté de baja por una lesión que le incapacite durante un periodo de tiempo transitorio para desarrollar su actividad habitual.
En la Correduría de Seguros Rafael Almeda le ofrecemos un producto con unas coberturas excepcionales para el profesional autónomo:
- Cirugía reparadora en caso de accidente.
- Doble indemnización en caso de accidente de circulación.
- Liquidación de saldos de tarjetas de crédito.
- Pago anual de todas las pólizas contratadas con la compañía aseguradora.
- Cobertura de atención médica en caso de accidente, en centros de reconocido prestigio.
- Servicio de enfermería en casa en la primera semana de convalecencia.